viernes, diciembre 04, 2009

"Dulce" tentación.

Acaricio suavemente la escopeta. Mis dedos se deslizan lentamente sobre el inerte metal, formando sinuosos caminos. Una pausa. Un agarre fuerte y de nuevo, un aflojar de tensiones rojas, que se despiden, se exhalan en el aire, aliviadas por la bienvenida libertad, por no convertirse en algo más. Mente ausente, que de repente, reacciona y ve a través de las cadenas de impotencia que la atan, de esa mezcla extraña de cielos grises, bañados en el enfermizo y fugaz deseo de la sangre y los aguaceros de nostalgia.

- No son conejos. No son conejos- repite.

Guardo la barra de batalla, de fuego silenciado, allá donde nunca debió haber salido: la cima del armario. Vuelvo la cara. Miro a la noche y no la puedo sonreír. Pienso en mi casa. La echo de menos. Allá, en la lejanía, una luz se enciende, una luz accionada por la mano invasora, una luz que sigo pagando. Y atesoro días en cometas de papel, que suplican una esperanza, un día en que la Justicia decida abrir los ojos. Ahora, yo también soy perro triste y sin hogar, pero a mí no me ven; los días en el hotel van desgastándose como los pétalos al llegar el otoño.

El arma, con su macabro baile seductor, me vuelve a llamar, me silba, me evoca, en notas de silencio. Siempre igual, con ese agudo chillido vacío con altos poderes hipnotizantes. Me tapo los oídos en las sábanas de la ignorancia: una cuesta hacia arriba. Me pregunto cuánto podré aguantar así.

Nota: últimamente, he visto o he oído casos como estos, con bastante frecuencia. Me llama la atención.

2 comentarios:

Esther dijo...

Sí, sé que soy insoportable XD Pero, mis manos a veces es como que se inquietan y tengo que escribir en algún sitio, tengo que darlas movimiento.

Por si mañana no fuera el enlace, cuento la situación, aquí en España: por lo visto, si alguien se va de vacaciones, debe tener cuidado, no sea que cuando vuelva, se haya quedado sin casa y la casa tenga unos nuevos e imprevistos dueños... Porque La Justicia, seguramente no te va a ayudar. No esperes nada de ella o casi nada... Ya saben como se las gasta hoy en día.

Lo ideal es que fuera fácil ayudar a todo el mundo.

Saluditos y buen fin de semana o puente para los que lo tengamos :)

Dinorider d'Andoandor dijo...

las sábanas de la ignorancia pasan factura