domingo, junio 28, 2015

Nostalgias

Tengo el inmenso placer de presentarles la poesía que hicimos entre Kadannek y yo. Le agradezco enormemente que aceptara mi invitación, su interés y el haber firmemente contribuido a crear ese ambiente que siento que, a veces, no se da en este mundo capitalista donde la gente solo piensa en ganar y, en ocasiones, no tiene remilgos en machacar a otros; como siempre, y la misma historia de egoísmo, pavor, envidias y del... "no te enseño lo que sé. No te doy la llave porque podrías quitarme el puesto". Aunque, en ocasiones, puedo entender cierto hermetismo cuando se trata del pan principal que se come día a día, me ha encantado que nosotras, al menos, por esta vez,  hayamos podido romper esos temores y hayamos tomado el papel de maestras y alumnas a la vez, debatiendo, aportando cada una su punto de vista y mejoras, compartiendo técnicas narrativas y tratándomos como iguales, porque realmente, aunque suene a cliché NADIE ES MÁS QUE NADIE. Hemos fomentado y experimentado los inmensos valores y actidudes de compañerismo, respeto, tolerancia, apoyo, sinceridad, ayuda, entrega y el trato de igual a igual, entre otros. Más allá del resultado, del éxito o del fracaso, estoy contenta y orgullosa de nosotras mismas, por haber sido capaces de crear ese ambiente. Gracias, Kadannek, porque sin ti y sin la increíble calidad de persona que llevas dentro, no me hubiera sido posible y ese, es... precisamente, el ambiente que quería crear, siempre me gustó y deseé encontrar. GRACIAS por hacerlo posible.

No descarto volver a hacer otro texto con ella o con otra persona a la que le apetezca. Solo tienen que proponérmelo.

Y, ahora, ya doy paso al poema. Buen provecho.










Fuente de imagen:
 http://www.vjgandia.es/blog/


NOSTALGIAS

En aquel horizonte soñado
donde palpitó una vez la mañana,
ahora, trémulo y agonizante,
me arrastra el ocaso.
Me sé cautiva en su bruma,
me sé doliente en el aire,
me sé, incluso, olvidada,
en los ojos que más me odian.

Como una noche de hormigas,
como una estrella de espectros,
como un relámpago en su cuna
¡Ay, dolor, cómo me asfixias!

Y, así... bajo los aplausos vibrantes
de la ciudad delirante,
entre el enjambre filoso
de coches sin luna,
pienso que puedo ser la lluvia
que falleció en tu maceta
de campanillas dulces,
un gato sin mú-sica
¡o una primavera sin dueño!

Muchas cosas puedo ser,
allá, donde el silencio
ensordece mis sentidos.
Pero aun así,
en el más necio razocinio
de mi laberíntica cordura,
en la más alocada
carrera de mis lágrimas,
concluyo:

Quizás, muy adentro,
más allá del perfume
que despide la flor
aterciopelada de mi alma:
solo soy una niña
que ignora donde nace el grito
y se silencia el olvido.



jueves, junio 11, 2015

La gran estafa de tu vida.

Si comparto este vídeo es porque detecto su increíble valor y que mi... rebeldía, en cierta forma, es del todo comprensible.

CAMINEMOS HACIA LA LIBERTAD.


miércoles, junio 03, 2015

Carta XXIV (Capricho)

Ya está. Te lo advertí: te dije que si no aparecías continuaría escribiéndote; creí que lo habías entendido. Así que aquí me tienes, que aunque peque de pesada, no me importa porque, a ver si te enteras, pueden pasar 1000 años, que nunca me cansaré de escribirte, porque... a día de hoy, ESCRIBIRTE ES LA ÚNICA FORMA QUE CONOZCO DE AMARTE. Así que aunque, mis muñecas artrósicas trataran de enmundecerme las manos, aunque los dedos permanecieran rígidos como palos o aunque me faltaran los brazos, no te preocupes que continuaría fiel a mi cita, a no ser que pongas remedio con un beso.

Aquí me tienes, vestida con pijama de invierno en pleno junio, mientras la penumbra se me pega al cuerpo, invitándome a dormir en una nana de sueños, sueños que espero que me lleven hasta ti, aunque qué mejor sería un camino que un sueño, para poder sentir en la distancia, en el contacto, el pantanoso tacto de tu piel.

Querido, hoy me levanté con un propósito claramente caprichoso: quería escuchar el oro entre mis manos, pero me di cuenta de una cosa: no podía hacerlo sin ti. Querido ¿cómo crees que puedo coleccionar así los latidos de tu pecho? Quiero apoyar en él la cabeza y sentir el "¡Pum, pum! ¡Pum, pum!" cada vez que me sientas encima, debajo o bien cerca. Y ¿qué tal si le añadimos tu respiración plácida? El collar quedaría genial. Querido, pero... ¿acaso pretendes que me invente esta sinfonía dentro de la cabeza? ¿Cómo puedes pretender que cree eso de la nada? Vale, vale, continuaré creando luces y luciérnagas, lunas y estrellas fugaces dentro de mi habitación, si es que tú te empeñas, pero podría hacerlo mucho mejor, mucho mejor, si tú quisieras.  Todo sea con tal de seguir ejerciendo este noble oficio que es seguir amándote y ofreciéndote el corazón.

                                          La Justiciera del Amor/Felicity Nmc/ Esther

P.D: cuéntame cómo te ha ido, escríbeme, háblame, desde el borboteo suave de un sueño, desde la tierra mismo o desde un helicóptero, es igual. Cuéntame, si es que eres capaz.