miércoles, mayo 20, 2015

Carta XXIII (Tiempo)

Querido:

¿Cómo te encuentras? Si estás, si eres, si alguna vez fuíste.

Querido, te escribo con un año más sobre mis espaldas. Algo me dijo que era un número especial como aquel nueve de corazones que encontré en la carretera. Quizás, quise creerlo... Necesitaba creerlo, como muchas cosas que, en el fondo, todos necesitamos creer, especialmente, las almas solitarias como yo, los invisibles, los olvidados...

Cómo me gustaría creer en el amor y, aún, tontamente, aunque sepa de sus mentiras que se esconden tras los cristales, a veces, disfrazadas de alegría, aunque me aborrezca, aunque trate de quitarme los  cuchillos del estómago que tantas veces me clavaron, a veces, creo ver su estrella fugaz. Extiendo la mano, pero ella parece no ser para mí. A veces, creí tocarla con la punta de los dedos, pero cuando quise tenerla en mi cercanía, solo creó una defectuosa cacofonía que se hundió con el tiempo, PORQUE LA MENTIRA ABUNDA, LA MENTIRA ABUNDA...

Tiempo, quiero que pare el tiempo, pero el tiempo nunca deja de crecer y la distancia... Ya no quiero contar los días. Por favor,  inventen un cigarrillo en el que no solo pueda drogarme a ratos con mensajes de irrealidad. Sueños, describo sueños... es lo único que no me pueden ya quitar. Pero... los sueños no sacian, no sacian, solo son nanas que me arropan por las noches, pero son invisibles y sus tactos no se agitan en la piel.

Tic-tac, tic-tac, quiero que pare el tiempo, si ello supone no tenerte junto a mí. El tiempo duele y me raja la garganta. Podrás decir: "No parece que estés tan mal,te veo sonreír". ¿Qué opción tengo? Puedo sonreír con gente, pero no serán sonrisas del corazón o quizás solo sean un lucero minúsculo en un ámbito dominado de la oscuridad; las lágrimas también se cansan de crecer, de crecer o quizás, las expulse con mi llanto interior o de otra forma. SE ME OCURRE QUE DEBEN HABER MUCHAS FORMAS DE LLORAR.

Olvídeme, mundo. Yo no necesito su compasión: SOLO UN CORAZÓN DONDE QUEDARME A DORMIR MÁS QUE EN UN CUARTO DE ESTACIÓN.

Y, sí, querido, aquí me tendrás escribiéndote hasta la saciedad miles de repeticiones sin control que el tiempo me obligará a repetir pues, tu ausencia me repite en el estómago, y en cada uno de mis días.

El calendario en la cocina, en el ordenador, en el móvil, me informan de las páginas de 24 horas que pasan, sin que tú des señales de vida y yo... que ya no las quiero pensar, SI ELLO SUPONE ESTAR SIEMPRE SIN TI.

La Justiciera del Amor/ Felicity Nmc/ Esther/ Estefani, Elisabeth... (como quieras).

P.D: Soy cansina, aburrida, lo que quieras... pero no me importa porque hay algo de lo que nunca me cansaré: DE RECLAMAR EL SABOR DE TUS BESOS. 

3 comentarios:

Esther dijo...

Pero... es que también esta cuestión del tiempo es confusa, más de lo que parece. La materia sigue creciendo, seguimos creando sucesiones... hablo de tiempo, o quizás ya no sé de lo que te hablo. El mundo es un extraño cúmulo de contradicciones y muchas otras cosas, la mayoría de ellas no deseables.

Ya callo. Quizás tengo un don especial para los soliloquios silenciosos.

Dinorider d'Andoandor dijo...

sin duda el mundo es eso y a veces parece que no para de ir como el cangrejo o como el torbellino

Esther dijo...

Es verdad. Y la gente, cuanto peor, mejor :(, como me decía alguien cercano.

Bona nit, Dinorider :)