viernes, junio 06, 2008

Pintor.



Isidro, se recluye en su estudio y se deja seducir por el abrazo de la soledad. Su estudio realmente es una habitación semi vacía y serena. Desde el gran ventanal , allí en lo alto, se puede ver la gran masa de edificios apiñados, en una ofensa al desorden. Pero, lo más bonito es la luna con sus estrellas que rasgan la homogeneidad del negro noche. Es una estampa realmente conmovedora pero, no la única. Para él, cada objeto, cada mínimo rasgo de realidad pintado en este mundo, tiene un algo, oculto o no, que vale la pena retratar. Así que, coge su pincel y sus óleos y va creando su obra maestra. Cada pincelada es un acto de amor que va dando forma a la que será su obra de arte, una imagen que nunca morirá (al menos, eso es lo que cree), que quedará inmortalizada hasta el ocaso de sus días.

- ¿Qué guardas en esa habitación? Déjame ver.- había dicho una vez la chica con la que estaba saliendo, una vez que la invitó a su casa. Y entonces, entró de improviso.

- ¡Qué colección tan bella! ¿De verdad son tuyos?- la chica había quedado realmente extasiada, parándose frente a cada uno de los cuadros, recreándose con cada ventana de colores que formaban las más inimaginables y bellas combinaciones.- ¿Se los has enseñado a alguien más?

- No, los tengo aquí. Me gusta mirarlos y tenerlos conmigo.

- Pues deberías exponerlos en algún sitio ¿No crees que el mundo tiene derecho a admirar tan magnífica belleza?

¡Caray! Su chica tenía razón ¿Por qué tenía que esconderlos? Quizás estaba incurriendo en un acto egoísta ¿lo sería?

Llegó el gran día. Las puertas de la sala de exposiciones se abrieron y el público entró a tropel.

- ¡Qué cuadros más feos!

- ¡Jamás he visto una cosa tan horrorosa!

- ¡Feísimo!

Dos personas que miraron más de dos minutos los cuadros, se pusieron enfermas y tuvieron que ser llevadas con urgencia al hospital. Al darse cuenta de lo ocurrido, la gente dejó de vituperar y se dedicó a taparse los ojos o a apartar la vista, mientras alarmada, corría hacia la salida. Gritos:

- ¡Vamos a morir!

- ¡Socorro!

- ¡Ah!

Etc, etc.

El edificio quedó completamente desierto. Isidro y su chica, recogieron los cuadros. De nuevo volvieron al lugar donde fueron creados. No fue nada agradable para él aceptar que su obra no había sido muy bien acogida. Pero, aunque la sociedad no comprendiera su arte, éste no dejaba de serlo . Así que como cada noche, siguió sentándose tranquilamente en su taburete, cogiendo su pincel y dejando volar su creatividad. Cada pincelada le hacía sentir bien. Nada ni nadie podría separarle de su pasión.

- No todo arte es comprendido.- Murmuró para sí. Respiró hondo y siguió llenando su corazón de felicidad. Lo admiro.

13 comentarios:

Anónimo dijo...

la verdad es que eso de que "el mundo tenga derecho a conocer la obra" o pensar él si está siendo egoísta al no enseñarla, para que luego se lo agradezcan así, al final tienes que hacer lo que de verdad desees y no empezar a hacerte preguntas de si eres egoísta o no, ya ves lo que le pasó a isidro

amor

Anónimo dijo...

Una historia absolutamente genial, Esther.
Metáfora de la vida, de esta sociedad que nos ha tocado compartir. El mensaje que trasmites es maravilloso.
El arte, lo bueno, lo valioso, está en nosotros mismos. Nadie tiene derecho a decidir, existen muchos puntos de vista y eso es con lo que hay que quedarse.
Yo te admiro a ti, muchacha, por tu fina ironía al contar las cosas y por ello, te pido por favor que te des una vuelta lo antes que puedas por mi desván, pues tengo una sorpresa para ti. Je, je, je. Espero que te guste y que te haga la misma ilusión que a mí.
Eres grande Esther, así que no permitas que nadie te diga lo contrario.
Un beso fuerte y hasta pronto.

Yessi dijo...

Una hermosa historia que nos deja mucho para reflexionar.

Un gran abrazo.

Por cierto, hay algo para ti en mi blog.

Fernando Nerú dijo...

Ay Esther de mi corazon, como se alegra mi corazon al, volver a pasar por tu casa, ya que es casi como una terapia para él.

Muy buen trabajo amigo, como siempre te has lucido.

Un abrazo a la distancia.

Te espero en mi casa querida amiga.

G-russo dijo...

hacer el amor con las cosas que queremos, eso se llama pasion,, porque necesitar la aprobacion de los demas,,, si con la nuestra sobra,,, que pena que todos no aprendamos de esta metafora,, que necesitemos la aprobacion de los demas.... para ser feliz hay que cuidar las cosas que parimos, que salen de nuestro interior, no menospreciarlas, porque nos dicen loco, eso no sirve,, no importa lo que haces si no el sentimiento que le pones.............

Dinorider d'Andoandor dijo...

creo que el arte no le entra a todos, se lo pierden, por eso es mejor seguir con uno mismo y por uno mismo

Anónimo dijo...

Volvía a tu rincón de conversación para decirte que te enlacé en mi desván y así acortar las distancias. Espero que no te importe. Un beso.

Anónimo dijo...

Muy buena historia te seguiré leyendo saludos desde Mi Mundo

JAVIER AKERMAN dijo...

El Arte es como el Psicoanálisis, interpretación personal y vivencial en asociación libre.
Muy buen post.
Saludos cordiales.

Julius Contreras dijo...

¿desmayarse por ver un cuadro? el pintor no se debería desanimar. Cada quien saca sus demonios como bien le parece. Por último, salvo Umberto Eco, no he visto a un solo crítico que haya hecho algo que realmente valga la pena. Abrazos.

PARANOICO ILUSIONISTA dijo...

Me gusta la mentalidad de Isidro. El arte nunca debe estar encasillado en una serie de reglas estrictas. El arte es una forma de sentir y plasmarlo en un texto, cuadro, una canción...

También debe existir esas sensaciones esa forma de sentir para apreciar el arte....

Un placer de nuevo

Anónimo dijo...

Muchas gracias por pasarte por Mi Mundo ^^

Brujita dijo...

Que nadie comprenda lo que uno hace no significa que eso no sea importante y bello... bien por Isidro

Besines embrujados