Un 2008 llegó.

Qué rápido que pasaron las hojas del calendario. Un 2008, que en una noche llena de luces, color y jaleo, se sobrepone a un 2007 moribundo que inspira y expira las últimas gotas de aire, antes de morir. Un 2007, que rendido ante la fuerza de un ocho; desaparece, difuminándose en la noche lentamente, convirtiéndose en polvo, polvo de la esencia. Porque unos siempre se irán, otros quedarán y otros serán los que vendrán... ...y la vida seguirá así: siempre sujeta a los caprichos del tiempo. Sí, el 2007, se fue con todas las de la ley pero ¡Basta! ¡Basta de ponerse melancólico! ¡¡¡Hemos llegado!!! ¡¡¡Somos supervivientes, una vez más!!!

Ahora, el 2008, saluda con la mano; azul, soleado, radiante.

Unos, ahora, conspiran o, ya lo hicieron :

- ¿Qué haré en este 2008? ¿Qué voy a cambiar?

Otros, prefieren no proponerse nada; saben que jamás cumplirán nada o, simplemente se limitan a captar la fuerza del ocho, hasta hacerla costumbre.

Pero, el 2008 ahí está:

¡Bienvenido 2008!

A los que ya felicité, a los que no... ...a todos os deseo ¡¡¡ Un feliz Año Nuevo!!!