viernes, marzo 14, 2008

Piropos.



Pasa por delante una gacela ¿Es linda o no? Éso, quizás ni si quiera importe. Él se deleita mirando desde la sombra de un árbol llamado "lo ignorado", los movimientos naturales de su víctima. Sale a la luz, y me suelta:

- Ojalá fuera yo ese perro que llevas atado.

Sonríe pícaro, sediento, bien panchorro, plantado en la entrada del local. Me pareció ver unos ojos llenos de lujuria (quizás sea por todo lo que se mueve y lleve falda); me avergüenzo en el mismo instante en que esas palabras salen de su boca; no quiero mirarle, ni hablarle, me limito a tirar de la cadena del perro, crear su ausencia y huir con fingida tranquilidad, pero sin pausa. De repente, en mi camino, todo va tomando forma: ahora, dirijo un perro pero, lleva su cara, baboso y con ojos de tonto, no me quita la vista de encima; va arrastrándose ridículo y yo no puedo evitar reírme para mis adentros. Ahora, también noto que me he puesto contenta pero, esas notas de color se van perdiendo en el horizonte, al igual que esas palabras. Y se me ocurre hablar de los piropos,palabras que dicen y no dicen nada, palabras efímeras, vacías, palabras para atacar. Palabras de fuego, tierra, mar o de nada. Quienes las usan saben que son armas, efectivas o no pero, armas.

En algún lugar del ayer, del hoy, del mañana, alguien toca la flauta y algunas serpientes se remueven gustosas en su cesto; se dejan arrastrar por la música del maestro, como recibiendo una suave caricia. Escuchan lo que quieren oír e inconscientes se dejan encantar, enfermar. El maestro continúa su juego y dibuja una sonrisa en sus labios a causa de los buenos resultados. Puede que alguna de ellas quiera parar de danzar pero, ya no puede ¿qué fuerza extraña la ata?

Y así sigue, sigue girando inevitablemente el mecanismo de la seducción, con sus engranajes de acción-reacción. Y ellas, las serpientes, caen, viven, mueren o reviven. Mecanismo eterno, mecanismo de vida; causa de dolores o de alegrías; fábrica de palabras que se convierten en viento.

6 comentarios:

-Silencio- dijo...

Creo que todas hemos sido víctimas de los piropos, de los mecanismos de seducción... es un tema interesante, como lo que escribes y que he leído, inusuales e interesantes así definiría tus letras...

Un abrazo... te sigo leyendo...

Dinorider d'Andoandor dijo...

jajaja
acá también usamos eso de "baboso"

me pregunto cual sería el primer piropo

Anónimo dijo...

Hola. Qué tal? Creo que a mí al principio me hacían ilusión esos piropos pero, ahora ya no. ¿ Por qué me van a hacer ilusión si son puras mentiras? A veces, se conquista a alguien diciendo cosas que no se sienten y que simplemente se dicen en ese momento por decir. Si alguien por ejemplo, te dice: Te quiero.

No te fíes, porque quizás no sea cierto y te crees falsas ilusiones y falsas esperanzas y después éso te hará daño.

Bueno, un besito.

Leslie dijo...

Me he encontrado de frente con piropos tan vulgares que han hecho que lejos de sonrojarme, yo le suelte un coctel de groserias a quien me lo dijo

Otras veces, algunos, aunque medio subiditos de tono (de los que una jovencita debe ignorar) me han hecho sacar tremenda carcajada

Y hay aquellos, que te agarran de sorpresa, y son tan dulces que te alegran el dia...

Me gusto mucho el tema de este post... los piropos creo que son algo que nunca pasara de moda, existiran siempre...

Tambien me gusto la analogia de la serpiente...

Un abrazo!!

Brujita dijo...

cunado el comentario es soez, vulgar y fuera de tono pierde toda la gracia del piropo.

Besines embrujados

Anónimo dijo...

Yo casi siempre sonrio,o me parto de risa,jajajjaja
Alguna vez me he dado la vuelta para decirle al tio, que?
Es a mi? Que has dicho, no lo he oido bien?
Con algunos he llegado a entablar conversación y me han llegado a pedir perdón.
Para morro , el mio!
Un besote chiquilla, que eres mas guapa que las pesetas!